silencio

La vuelta a algo tan simple como un paseo nos hace ver la importancia de lo pequeño, la importancia de las rutinas, del contacto con los demás y de nuestra dimensión social.

Tengo momentos en los que pienso que esto nos hará mejores, nos hará capaces de crecer como personas y valorar lo bueno de cada individuo, de dar la importancia a las pequeñas cosas que pasaban desapercibidas y dejar el ruido al lado.

Otras veces solo escucho ese ruido que vuelve y que todo lo rodea. Ese ruido que nos hace seres poco empáticos, del que en ocasiones soy cómplice. Un ruido que tapa lo pequeño por algo necio y sonoro, un ruido sin ningún fondo o valor pero que tanto gusta, creo que demasiado...

Es entonces cuando pienso que tal vez debo volver a ese primer paseo, volver a ese pequeño paso hacia lo que habíamos olvidado y que hemos ansiado en apenas unas semanas, volver cada vez que dudemos que es posible caminar hacia una nueva etapa, dejando el ruido atrás. Valorando mucho más lo que tenemos, lo que somos y lo que podemos llegar a ser.